La COVID-19 llegó para cambiar las reglas del juego en cuanto a las rentas de oficinas. Aplica las pautas para una renegociación satisfactoria.

En todo el mundo, el brote de la COVID-19 ha sido un detonador para cambiar varios factores en el mercado de bienes raíces. Los contratos de alquiler, tanto de viviendas como de espacios de trabajo, se han visto afectados en esta coyuntura.

Ante este panorama, resulta prudente que las organizaciones lleguen a un acuerdo con los inquilinos de oficinas, dado que los arrendatarios pueden estar enfrentando nuevos escenarios en su vida personal y laboral.

Como arrendadores, podemos establecer una serie de pasos con los inquilinos para mantener el acuerdo en los mejores términos. Este replanteamiento debe ser beneficioso para ambas partes.

Las etapas recomendadas por la empresa Cushman & Wakefield son una serie de recomendaciones que los arrendadores deberían tomar en cuenta si quieren continuar ganando a pesar de la crisis:

  • Paso 1: Pedirle información al inquilino

Preguntar si ha solicitado algún tipo de ayuda económica al Gobierno. De ser el caso, saber de manera formal las razones de dicha solicitud y el tipo de ayuda recibida.

Evidencia de algún tipo de seguro con que cuente la empresa y los montos de cobertura definidos que brinden un soporte a las acciones del inquilino.

Actualización de la información del representante legal de la empresa y si es posible proporcionar un organigrama.

Información de los últimos tres años de estados financieros auditados y declaraciones de impuestos, estado financiero actual y balance general actual.

  • Paso 2: Preparar la información del arrendamiento

Resumen del contrato de arrendamiento: principales condiciones.

Indicadores de precio de alquiler actual y deudas por cobrar al arrendatario.

Monto de la garantía del arrendamiento (medio financiero).

Opciones vigentes en el contrato de arrendamiento como los derechos de renovación, expansión y/o terminación.

Acuerdo de confidencialidad para comprender los estados financieros de los inquilinos y cualquier término de resolución

  • Paso 3: Mecanismos para ayudar al inquilino

Reducción parcial o total del pago del alquiler por un tiempo limitado; por ejemplo, a 30-90 días, el inquilino deja de pagar el alquiler base pero cubre los gastos operativos.

Aplazamiento del pago del alquiler por los próximos 30-90 días, considerando que este se amortizará en períodos futuros (por ejemplo, el año 2021).

Reducción del pago de alquiler a cambio de la negociación de términos de extensión del arrendamiento, modificación o eliminación de ciertas cláusulas de arrendamiento.

Solicitar un depósito de seguridad o una carta de crédito como garantía.

El inquilino debe renunciar a ciertos derechos legales si se producen incumplimientos futuros. Este último punto se negociaría únicamente si los anteriores no se han podido concretar.

Cabe resaltar que todos estos consejos dependen de las leyes de cada país, y aunque deben ser tomados como consejos comerciales, no se debe dejar de consultar con profesionales como abogados, aseguradoras, asesores fiscales, gestores de riesgos para comprender y proteger mejor tus derechos como arrendador sin arriesgar tu generación de ingresos por alquiler de oficinas.

La pandemia nos ha colocado en una situación nunca antes vista que requiere nuestros mayores esfuerzos por subsistir del modo más cordial posible, también en los negocios.

Fuente: La República